El impacto del proyecto Lowell en la comunidad Warints
Shimpu Segundo Wachapa Tsuink, un hombre de 30 años que vive en la comunidad de Warints, ha experimentado de primera mano el impacto transformador del proyecto de la empresa Lowell en su vida y la de su familia. Padre de tres hijos, Shimpu ha logrado finalizar sus estudios secundarios y, gracias a las oportunidades brindadas por la compañía, ha obtenido su licencia de conducción tipo C. Ahora, su próximo objetivo es conseguir la licencia tipo E y capacitarse para operar maquinaria pesada, con el propósito de seguir contribuyendo al proyecto minero.
Antes de la llegada de Lowell, la vida en Warints era mucho más limitada. Shimpu recuerda cómo su padre se dedicaba a la minería artesanal, lavando oro y utilizando mulas y ganado para generar ingresos que apenas alcanzaban para el sustento familiar. “Con eso nos sustentábamos”, comenta Shimpu. Gracias al apoyo de su padre, pudo completar su educación hasta el bachillerato, pero las oportunidades eran escasas. Todo cambió con la llegada del proyecto.
Hoy, Segundo ha logrado construir una casa para su familia, adquirir ganado y mulas, y sobre todo, ve un futuro más prometedor. “El proyecto que a mí me ha beneficiado, me ayudó a obtener mi licencia, hacer mi casa y tengo la meta de construir otra para mi familia”, afirma con orgullo. Para él, el proyecto no solo le ha dado estabilidad económica, sino también una nueva motivación para continuar estudiando y progresando.
Shimpu cree firmemente que, sin el proyecto, su vida seguiría centrada en la agricultura de subsistencia, y las posibilidades de crecimiento personal y profesional habrían sido mínimas. Por eso, recomienda que iniciativas como esta se implementen en otras comunidades.