🌎 TRANSICIÓN ENERGÉTICA SEGURA: LOS PANELES SOLARES Y LAS EMISIONES CERO
Los cambios climáticos que está atravesando la tierra son una consecuencia de la gran cantidad de contaminación que genera el ser humano, motivo por el que muchas empresas y naciones han enfocado parte de sus esfuerzos en reducir la contaminación, encaminando así sus objetivos con una transición energética hacia las emisiones netas cero.
Para poder concretar una transición efectiva se han desarrollado diversas herramientas que reemplazan a las energías producidas a través de combustibles fósiles, como es el caso de los paneles solares, en donde podemos identificar a China como el país con mayor cantidad de cadenas de suministro de estos, información que ha sido arrojada en un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), resaltando cómo las políticas industriales y de innovación chinas se centran en la expansión de la producción y los mercados de paneles solares, factores que han propiciado que esta tecnología sea una de las más asequibles en diversas partes del mundo, así como también ha causado desequilibrios en las cadenas de suministro.
De esta manera, podemos ver que en la actualidad la capacidad de fabricación mundial de paneles solares se ha desplazado de Europa, Japón y Estados Unidos hacia China, registrando que la cuota de la nación en todas las fases clave de fabricación de paneles solares supera el 80%. «China ha contribuido a reducir los costes de la energía solar fotovoltaica en todo el mundo, con múltiples beneficios para la transición a la energía limpia», dijo el director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol.
El ambicioso objetivo de AIE es alcanzar las emisiones netas cero para 2050, lo que demanda una mayor capacidad de producción, pues para concretar las metas en materia de energía y clima es necesario cuadriplicar los sistemas de electricidad de todo el mundo para 2030. Dentro de este contexto, hay que recalcar que la producción de paneles solares demanda de elementos como el polisilicio, lingotes, obleas, células y módulos, mismos que se desarrollan con minerales extraídos a partir de la minería, pero que compensa la contaminación generada para su fabricación con un uso de cuatro u ocho meses. Este periodo de amortización se compara con la vida media de los paneles solares, que es de unos 25 a 30 años.
De igual manera, el informe elaborado por AIE analizó los retos en el desarrollo de un suministro de energía solar fotovoltaica en lo que se refiere a la creación de empleo, requisitos de inversión, costes de fabricación, emisiones y reciclaje, concluyendo que las nuevas instalaciones de fabricación de energía solar fotovoltaica, a lo largo de la cadena de suministro mundial, podrían atraer una inversión de 120.000 millones de dólares para 2030, acotando que esto también a motivado a diversos gobiernos a implementar políticas que buscan apoyar la transición energética.
Fuente: World Energy Trade
