ECOSISTEMAS DE APRENDIZAJE Y LOS RETOS DEL SECTOR MINERO EN ECUADOR
Siempre que se habla de los Empleos del Futuro, es natural intentar clasificarlos de una forma binaria, la mayoría de las personas intentan agruparlos en dos categorías; por un lado, las vinculadas a tecnologías de la información y comunicación (TIC), por el otro, todas aquellas tradicionales, aquellas que nos han acompañado durante toda la era de la sociedad industrial.
Como consecuencia natural de esta clasificación y la velocidad a la que evoluciona la tecnología, el sentimiento que nos invade es de incertidumbre y preocupación sobre los empleos que desaparecerán. En la actualidad cualquier empleo puede ser impactado por las tecnologías digitales.
En este contexto, vale la pena preguntarse ¿Cuáles son los Retos del Sector Minero en Ecuador?
Para responder a esta pregunta lo mejor es agrupar los retos por categorías:
Sociales y el Marco Legal: Están relacionados con la percepción que tiene la población en general sobre el impacto de la minería al ambiente, un factor que es medido desde el impacto que genere la extracción informal y la artesanal de los recursos naturales. Esto desde luego que genera mucha presión social y puede sesgar significativamente las leyes que regulan el sector.
Económicos y Tecnológicos: Vinculados a la búsqueda de la eficiencia y la competitividad nacional e internacional de la actividad productiva, algo que definitivamente requiere del análisis para la selección adecuada y la gestión de la inversión requerida.
Gestión de Talento Humano: Esta categoría definitivamente es la más compleja, ya que “el éxito de todos los procesos de una organización depende del componente humano”. No por casualidad cuando revisamos los informes de las organizaciones que observan los cambios y retos que plantea la Transformación Digital (TD) para los diferentes sectores de la sociedad, siempre hacen énfasis en la gestión del talento humano y el desarrollo de habilidades blandas. No importa si hablamos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Organización Mundial del Trabajo (OMT), el Foro Económico Mundial o investigaciones privadas, el resultado es consistente.
Algunos de los obstáculos asociados a la gestión de talento humano son los siguientes:
- Resistencia al cambio: la incorporación de nuevos procesos e implementación genera temor en los involucrados que puede ser manifestado de diferentes formas, entre ellas tenemos comportamientos que van desde el retraso intensional hasta la oposición frontal.
- Encontrar los perfiles requeridos: la brecha que existe entre los perfiles disponibles y el mapa de habilidades requeridas no es un problema nuevo, sin embargo, esta diferencia incrementa en la medida que maduran las nuevas tecnologías.
- Malas prácticas en la adopción tecnológica: ocurre cuando se seleccionan tecnologías no apropiadas o sin vinculación al problema real, también cuando las metodologías no se orientan a las necesidades de la organización ni a los resultados deseados.
- Rotación laboral: cuando las empresas pierden a un colaborador que ya se ha adaptado a la organización y conoce los procesos, esto representa un retraso importante porque quien lo reemplace debe recorrer una curva de aprendizaje para recuperar el desempeño anterior.
- La necesidad de capacitación constante: Si hay algo seguro en este nuevo modelo social es que debemos capacitarnos permanentemente, esto se convierte en un problema cuando los involucrados han tenido malas experiencias en sus procesos educativos o hay técnicas de estudios inadecuadas.
¿Qué habilidades deben ser impulsadas en el sector?
La humanidad ya se encuentra en un nuevo paradigma científico, uno guiado por la disponibilidad abundante de datos y la capacidad de cómputo para procesarlo, el reto está en poder crear conocimiento a partir de ellos, es necesario dar la importancia adecuada al desarrollo de destrezas asociadas a estadística descriptiva e inferencial, programación y visualización de datos.
Gradualmente la sociedad lo irá adoptando, pero debemos tener en cuenta que quienes lo adoptan de forma temprana generan ventajas de mercado importantes, y en el caso de los profesionales salarios más competitivos, por el contrario, quienes esperan demasiado solo se adaptan al mercado y lo hacen en un contexto más exigente.
Una habilidad importante es la capacidad de proponer soluciones a problemas del sector incorporando soluciones tecnológicas modernas como sensórica, robótica avanzada, nuevos materiales, drones y vehículos autónomos, cadena de bloques, entre otros.
Ecosistemas de Aprendizaje Inteligente una Solución Integral
La creación de entornos digitales para la formación corporativa puede abordar adecuadamente la mayoría de los problemas descritos anteriormente, desde la percepción errada de la minería hasta la rotación laboral.
Estos entornos, cuando son diseñados adecuadamente, pueden generar una experiencia placentera en el proceso de aprendizaje e incluso puede incorporar hasta técnicas de gamificación.
Pero, como cualquier adopción tecnológica, requieren una inversión acorde a la complejidad del proyecto. Estos ecosistemas, para la formación corporativa, requieren una revisión completa del ADN de la empresa, los objetivos de corto, mediano y largo plazo de la organización, los procesos internos, áreas operativas y finalmente la valoración de las líneas de negocio.
Desde la perspectiva individual es importante resaltar que la gestión del conocimiento indudablemente será una habilidad clave de los profesionales del futuro, pero esta es una habilidad que puede ser aplicada a las empresas y organizaciones.
Cualquier empresa que quiera implementar un proceso de Transformación Digital, debe tener en cuenta que el principal reto de ello está en el talento humano y no en la tecnología.
Redacción. – Sergio Lira Gerente General & CEO de Ingeniería 4G
