
Proyecto minero en Utah aprobado en tiempo récord por Trump
La mina Velvet-Wood, en el sureste de Utah, se ha convertido en el primer proyecto aprobado bajo un nuevo procedimiento de emergencia impulsado por el gobierno de Donald Trump. La decisión responde a una declaración de emergencia energética nacional emitida el mismo día que el expresidente asumió su segundo mandato en enero. El objetivo: agilizar la aprobación de proyectos estratégicos en terrenos federales, reducir los costos de combustibles y fortalecer la seguridad nacional.
Tradicionalmente, los procesos de revisión ambiental para actividades como la minería de uranio toman años debido a los riesgos asociados a la salud y al medioambiente. Sin embargo, en este caso, la aprobación llegó en solo dos semanas, tras la presentación del plan por parte de Anfield Energy el 1 de abril. El proyecto recibió el visto bueno oficial el 15 del mismo mes, gracias al nuevo marco legal que permite omitir ciertos pasos clave, como las consultas públicas y las evaluaciones técnicas extensas.
La medida fue celebrada por sectores industriales y defensores de la soberanía energética. “Esto marca un punto de inflexión en cómo aseguramos el futuro minero de Estados Unidos”, declaró Doug Burgum, secretario del Interior. La mina producirá uranio, crucial para la energía nuclear y la industria armamentista, y vanadio, útil para baterías y aleaciones metálicas.
No obstante, la rapidez del proceso ha generado preocupación. Organizaciones ambientalistas y grupos indígenas cuestionan la falta de participación ciudadana y consulta previa. “Se ha pasado por alto la salud de las comunidades y la protección de los ecosistemas”, señaló Nancy Roberts, del Instituto para la Política Ambiental.
Expertos temen que este precedente se aplique a futuros proyectos de litio, tierras raras y cobre, esenciales para la transición energética, pero igualmente controversiales por su impacto ambiental.
Anfield Energy prevé iniciar trabajos preliminares en 2025 y procesar el uranio en su planta de Shootaring Canyon. Mientras tanto, el caso Velvet-Wood abre un nuevo debate sobre el equilibrio entre seguridad energética y responsabilidad ambiental en Estados Unidos.
Fuente: Política Minera