minería ilegal Chumbiyacu Napo
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minería ilegal Chumbiyacu Napo

🇪🇨 RÍO CHUMBIYACU MUERE POR CULPA DE LA MINERÍA ILEGAL EN NAPO

La minería ilegal tiene diversas consecuencias no solo en las comunidades a las que afectan sus actividades, sino también al medio ambiente, lo cual acaba impactando en la forma de vida de muchas personas que dependen de esos recursos para vivir, ya que, al ser una actividad ilícita, no les interesa las afectaciones que puedan generar al entorno, contaminando fuentes de agua, como es el caso del río Chumbiyacu, ubicado en la provincia de Napo. 

 

Ya son 10 años desde que la minería ilegal llego a las orillas de Chumbiyacu, tiempo en el que las comunidades aledañas al cause han visto cómo se ha transformado el agua cristalina a un agua turbia por culpa del mercurio y plomo que se utiliza en las explotaciones para extraer y separar los minerales y metales, causando la muerte de ecosistemas que ayudan a la supervivencia de las comunidades. 

 

Los moradores de la zona comentan que la empresa minera china Terraearth Resources, quien tiene la concesión desde el año 2001, incrementó la explotación desde 2017 y hasta marzo de 2022 ha destruido un territorio equivalente a 400 canchas de fútbol profesional en la selva donde se encuentra la comunidad de Shihuacocha del cantón Carlos Julio Arosemena Tola. 

 

Es en 2021 que el río Chumbiyacu fue oficialmente declarado muerto por la Universidad Estatal Amazónica (Ikiam), esto en base a que tiene 500 veces más metales pesados de lo permitido en agua marrón impropia de este río, un agua que cada día baja más turbia y con peces muertos, a la vez que ha contaminado a comuneros por culpa del mercurio. 

 

Actualmente Shiguacocha depende del agua de lluvia para poder subsistir, lo cual complica su ya difícil realidad, pues la falta de líquido vital impide criar ganado, y, a pesar de que el pasado 6 de septiembre del presente año hubo una nueva suspensión de operaciones a la minería ilegal, la actividad continúa ante la ausencia e inoperancia de las autoridades estatales. 

 

Fuente: Prensa Minera 

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