Futuro minero de Ecuador: inversión y crecimiento clave
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Análisis del sector minero: presente ecuatoriano y futuro regional

El sector minero emerge como la gran apuesta económica de Ecuador para la próxima década. Así lo revela el informe «El futuro minero de Ecuador: entorno, perspectivas y comparativa regional», presentado el pasado jueves 29 de mayo por las consultoras Humboldt Management y Aequus Economics. Los economistas Santiago Caviedes y Juan Lorenzo Maldonado desglosaron datos contundentes: en 2024, la minería ya representa el 8.9% de las exportaciones nacionales (USD 3.000 millones), equivalente a lo que exportan banano o cacao, pero con una diferencia crucial: su crecimiento se basa en volumen, no solo en precios altos.

 

 

El potencial es transformador. El estudio identifica ocho proyectos clave –como Cascabel, Warintza y la expansión de Mirador– capaces de atraer más de USD 14.000 millones en inversión durante los próximos años. Esto duplicaría las exportaciones mineras actuales, alcanzando los USD 9.000 millones anuales (igualando al petróleo), y generaría unos 12.000 empleos directos durante su fase de construcción. Considerando el efecto multiplicador (cada empleo minero genera tres fuera del sector), la minería ya sostiene unos 200.000 puestos de trabajo en el país y esta cifra crecería significativamente.

 

 

El impacto va más allá de macroindicadores. Juan Lorenzo Maldonado destacó cómo Zamora Chinchipe, provincia con minería activa, redujo su pobreza multidimensional del 60% al 55% entre 2018 y 2024, mientras en el país se mantuvo estable. En contraste, Morona Santiago (vecina y sin minería operativa) vio aumentar sus índices de pobreza. «La minería ha ayudado a que el país tenga una estructura externa más sólida y resiliente», afirmó Maldonado, subrayando cómo diversifica una economía antes dependiente del crudo.

 

 

Sin embargo, el camino exige prudencia fiscal. Santiago Caviedes advirtió que Ecuador ya impone una de las cargas tributarias mineras más altas de la región (41% o más, incluyendo regalías anticipadas y el «Ajuste Soberano»), superando a Perú o Colombia. La minería es ya el quinto generador de impuestos del país, aportando cerca de USD 1.000 millones anuales (equivalente a un punto del IVA). Caviedes alertó que medidas como eliminar la devolución del IVA a este sector –discutida recientemente– desincentivaría inversiones cruciales, pondría en riesgo contratos y ahuyentaría capitales hacia países vecinos con mayor estabilidad tributaria (como Perú o Chile, que ofrecen garantías de 15 a 30 años). «No hay que matar la gallina de los huevos de oro», sentenció.

 

 

El informe refleja un futuro donde la minería, manejada con visión estratégica y equilibrio fiscal, puede ser el motor que impulse el crecimiento económico nacional, genere empleo masivo, fortalezca las finanzas públicas y reduzca la pobreza en provincias históricamente relegadas. El reto inmediato es crear un marco regulatorio estable y competitivo que convierta el potencial en USD 14.000 millones de inversión y miles de empleos en una realidad tangible para Ecuador.